'/>

viernes, 5 de junio de 2009

¿ADÓNDE VAS YAYITA?





Adónde vas, Yayita.

Cuando llegaste eras inquieta e indomable,
pequeña fierecilla valiente…

Cuando llegaste eras comilona e intratable,
perrita linda, de ojos marroncillos, de piel acaramelada y bella.

Pero hoy te vas, en silencio, sin llanto.

Hoy casi toda la casa está vacía.
No hay tu bulla, ni el ruido de tus pasos nocturnos.

Ya no corres, ¿Por qué ya no corres alegremente?
Yo no estás aquí, Yayita linda.

Te vas habiéndonos dicho antes adiós.
Hemos sufrido, y aún estaremos así sin ti.

Acabamos de cerrar los ojos y te hemos visto, desde el corazón, a nuestro lado, en compañía, con los ojitos brillosos.

Abrimos (nos duele) y cerramos los ojos una vez más.
Estás al lado de la mesa, rugiendo como una leona, pidiendo un bocado.
Ahí va el bocado, ahí saltas con mucho impulso, para pescar la presa en el aire, fiera.

Abrimos los ojos. Te has ido en silencio, con el llanto dentro de ti para que no suframos.

Tú te vas, pero nosotros quedamos aquí, viviendo los años, los días y las horas, en que a partir de este momento ya no estarás con nosotros.

Volveremos a vernos.
Volveremos a darte el bocado preferido, un plato de cariño, una mesa servida de mucho respeto y amor para ti, guardiana del hogar.

Si nos llegar a ver algún día y no nos damos cuenta, ladramos, para acariciarte y acordarnos que sólo fue un largo viaje. Esta es la parada. Ahí estamos a tu lado.

Hoy el día es negro y triste.
Hoy no hay alegría.

Ya no estás, Lloca, lloca.
Te amamos muchos.
Buen viaje, Yayita.

Tú siempre estarás con nosotros.
Lloca, Lloca.
Lloca, Lloca.
Yayita.

0 Comments: